Una nueva escapada gastronómica pudimos hacernos el mes pasado, con la llegada del otoño, la Ribera del Duero y los Picos de Urbión estaban teñidos de unos colores maravillosos.
Además de degustar buenos platos y tener la oportunidad de saborear el delicioso vino de la tierra, tuvimos la suerte de relajar la mente, abrir nuestros pulmones y disfrutar de la naturaleza, el silencio y lo que es importante, apartar la rutina, y disfrutar de mi pareja.
La próxima, os adelanto que huele a mar...
Además de degustar buenos platos y tener la oportunidad de saborear el delicioso vino de la tierra, tuvimos la suerte de relajar la mente, abrir nuestros pulmones y disfrutar de la naturaleza, el silencio y lo que es importante, apartar la rutina, y disfrutar de mi pareja.
¿te apetece disfrutar con nuestra aventura?...pues pincha en el siguiente enlace
La próxima, os adelanto que huele a mar...